feb 2020

Con la intención de aprovechar el poder del arte para inspirar la acción ambiental, la décima sexta Bienal Internacional del Cartel en México llama a artistas de todo el mundo a presentar sus carteles en seis categorías, una de las cuales está dedicada al medio ambiente.

La convocatoria de esta nueva edición de la Bienal estará abierta hasta el 15 de mayo de 2020.

Durante los últimos 30 años, alrededor de 70.000 carteles procedentes de los cinco continentes se han presentado a este concurso, que se realiza en la Ciudad de México. El Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente ha apoyado la categoría ambiental de la Bienal desde 1990.

La edición de 2020 estará dedicada a la biodiversidad, que es el tema del Día Mundial del Medio Ambiente, el 5 de junio, la plataforma más importante de las Naciones Unidas para fomentar la conciencia ambiental. Colombia será el país anfitrión de esta celebración anual.

Artistas contemporáneos de todo el planeta han participado en la Bienal Internacional del Cartel y han hecho gala de su creatividad para describir los desafíos ambientales y transmitir su relevancia y urgencia, a menudo de una forma incómoda y difícil de ignorar.

Por ejemplo, Maja Zurawiecka, una artista visual de Polonia, optó por un estilo grotesco para retratar las amenazas al bosque de Bialowieza, Patrimonio Mundial de la UNESCO en la frontera entre su país y Bielorrusia. El elemento protagónico de su cartel es una mano amputada en medio de hojas secas.

“El mensaje de mi cartel es sencillo: no somos nada sin la naturaleza. Cuando cortas un árbol, es como si te cortaras tu propia mano. Estás llevándote una parte de nuestra vida en este planeta”, dijo Zurawiecka, ganadora del primer lugar en la décima cuarta edición de la competencia.

Entre los temas que han abordado los artistas que han participado en el concurso están la biodiversidad, la contaminación por plásticos, el calentamiento global, la economía verde y la reducción de la huella de carbono de los alimentos. En la última edición del concurso, 1.645 carteles fueron presentados en la categoría ambiental. El diseñador chino Yongkang Fu ganó el primer lugar por su obra “Living Space”, que evoca el impacto nocivo de la contaminación por plásticos en la vida marina.

2020 ha sido calificado como un “súper año” para el medio ambiente, en el cual se espera establecer la agenda de la acción ambiental de la próxima década en una serie de reuniones cruciales, incluida la 15ª reunión de la Conferencia de las Partes (COP15) del Convenio sobre la Diversidad Biológica, en Kunmíng, China, y la Conferencia de la ONU sobre Cambio Climático COP26, en Glasgow. La COP15 discutirá la audaz propuesta de proteger al menos 30% de toda la superficie terrestre y marina del planeta.

“Este año, el tema de la Bienal es más relevante que nunca, ya que estamos experimentando una pérdida irreversible de biodiversidad a una escala sin precedentes”, dijo Leo Heileman, director regional del Programa de la ONU para el Medio Ambiente para América Latina y el Caribe.

 “Bastan tres segundos para conservar en la memoria el mensaje de un buen cartel,” dijo Xavier Bermúdez, director de la Bienal desde su fundación. “La Bienal pretende, junto con la ONU, generar conciencia e inspirar a las personas a cambiar estilos de vida. No basta la denuncia, un buen cartel nos debe motivar a tomar acción”, añadió.

La escala del colapso actual de la biodiversidad no tiene precedentes. El informe del IPBES advierte de que más de un tercio de todos los mamíferos marinos, más de 40% de las especies de anfibios y 10% de los insectos se encuentran bajo amenaza. 

“El cambio empieza con la generación de conciencia. Conciencia de que no estamos solos en el planeta Tierra. Conciencia de que todas nuestras decisiones y acciones tienen repercusiones en otros seres humanos, animales y plantas”, dijo Fatoumata Dravé, diseñadora canadiense que ganó el segundo lugar en la Bienal de 2016. Su obra, titulada “Toxicité”, trató el devastador impacto de la producción de aluminio en la vida marina.

“Siempre me he preocupado por cómo los diseñadores gráficos podemos opinar sobre los problemas sociales. Aproveché la oportunidad de la Bienal para hacer un cartel basado en la investigación sobre biodiversidad, intentando crear un mensaje que pueda impactar”, agregó.