Se trata de una startup de belleza sostenible y cuidado personal que comenzó en el programa de búsqueda de talentos Shark Tank. Nohbo está combatiendo el exceso de desperdicio de botellas de plástico al fabricar las primeras ‘gotas de cuidado personal’ solubles y de un solo uso.
Al encapsular una fórmula innovadora de productos de belleza de alta calidad y alto rendimiento en una membrana soluble en agua, Nohbo se puso como objetivo eliminar las botellas de plástico de la industria de la belleza y el cuidado personal.
“Somos una empresa de investigación y desarrollo impulsada por una misión fundada con la premisa de erradicar las botellas de plástico de un solo uso innecesarias en áreas donde realmente no se requiere de ellas”, dice Benjamin Stern, su joven CEO.
Nohbo es un acrónimo de No–Hair-Bottles. Su innovación, dirigida a encontrar soluciones sostenibles en líneas de productos de cuidado personal, tanto para hoteles como para consumidores finales, busca deshacerse de botellas de plástico innecesarias y contaminantes.
Lo interesante es que Nohbo elimina el ciclo de reducción, reutilización y reciclaje: simplemente no utiliza plásticos!!! Los reemplaza por una película externa biodegradable diseñada para descomponerse rápidamente en el agua de la ducha.
Una gota de Nohbo es una ‘cápsula’ soluble en agua, de un solo uso, que contiene una dosis perfecta de champú, acondicionador, gel de baño o crema de afeitar. Cada gota, cuando se mezcla con agua durante 10 a 20 segundos, se disolverá, dejando disponible el producto de cuidado personal sin haber usado químicos agresivos, ni parabenos o sulfatos, cuidando el medio ambiente.
Bajo el agua, las gotas de Nohbo se activan y están listas para su uso directo. Otros productos de la empresa como las pastillas de jabón en láminas se disuelven en 2-3 segundos y forman espuma casi instantáneamente.
Los cuidados ambientales se extienden incluso al embalaje exterior del producto hecho de vegetales biodegradables derivados de la caña de azúcar que evitan un exceso de humedad que podría destruir el producto. Los envases al desecharlos volverán a la tierra para convertirse en abono.